El fallecimiento de un ser querido siempre es un momento complicado y, además, surgen numerosas dudas legales al respecto, sobre todo en lo que se refiere al testamento. Por ejemplo, una de las dudas más frecuentes en Legaltic es: ¿se puede impugnar un testamento? De entrada, ya le adelantamos que sí que es posible, no obstante, hay que cumplir una serie de requisitos.
Hemos preparado un artículo para explicar de forma breve y precisa cómo impugnar un testamento, cuáles son las causas y los pasos que se deben seguir. Sin embargo, recuerde que lo más importante es contar con un asesoramiento legal desde el principio para evitar posibles conflictos.
¿Qué significa impugnar un testamento?
La impugnación de un testamento significa solicitar por vía judicial la invalidez total o parcial para que se pueda ajustar a la legalidad vigente. Es importante tener en cuenta que no se trata de estar en desacuerdo con el contenido, sino de acreditar que existen causas con fundamento para considerar que el documento no tiene soporte jurídico.
Esta posibilidad está regulada en numerosos artículos del Código Civil (673, 676, 677, 737, 850, etc.). Por ello, la legislación española reconoce este derecho y establece los motivos por los que se puede impugnar o anular un testamento. Es fundamental que tenga en cuenta que no todos los testamentos son inamovibles, es decir, si se han vulnerado los derechos de los herederos forzosos o si existen defectos formales, por poner algunos ejemplos, se puede acudir a los tribunales.
Causas por las cuales se puede anular un testamento
Lo primero a valorar es si hay causas para anular un testamento, más concretamente las que están reguladas en la ley:
- Incapacidad del testador. Este hecho se produce si en el momento de otorgar el testamento, el testador no tenía plena capacidad mental (demencia o ceguera, por ejemplo), ya que en este caso se puede declarar nulo si se acredita tal situación.
- Vicios de consentimiento. Sucede cuando el testamento se ha otorgado bajo coacción, engaño o amenaza por parte de una tercera persona.
- Falta de formalismo. El testamento debe cumplir con una serie de requisitos de forma. Un buen ejemplo es el testamento ológrafo, es decir, debe estar escrito y firmado por el testador, con fecha incluida.
- Vulneración de la legítima. En nuestro ordenamiento jurídico existe la figura de la legítima, es decir, una parte de la herencia obligatoriamente le corresponde a los hijos, padres o cónyuge. Por ello, si el testador reparte los bienes sin respetar este extremo, se puede solicitar la nulidad del testamento.
- Testamento posterior. El testamento también es nulo si aparece uno posterior, es decir, que sea más reciente.
Las causas están muy claras y tasadas, ya que si a un testador le obligan a hacer testamento o este reparte los bienes solo entre sus sobrinos, por ejemplo, la seguridad jurídica desaparecería en este campo.
Requisitos para impugnar un testamento
Antes de solicitar la impugnación de un testamento es imprescindible verificar si se cumplen una serie de condiciones para que sea posible iniciar una reclamación judicial:
- Legitimación activa. Este término hace referencia a las personas que tienen derecho a litigar en un procedimiento concreto. En el caso que nos ocupa, solo pueden impugnar el testamento aquellas personas que vean directamente afectadas por su contenido. Por ejemplo: el cónyuge del fallecido que ha sido desheredado injustamente.
- Plazo. Las acciones en Derecho siempre están sujetas a un plazo de caducidad o prescripción. Por ello, para la impugnación de un testamento el Código Civil establece un plazo de 4 años desde que se tuvo conocimiento de la nulidad.
- Pruebas. Es importante destacar que la carga de la prueba en este tipo de procedimientos siempre recae sobre quien impugna (hijo, cónyuge, hermano, etc.). Por lo tanto, es la parte afectada quien debe aportar todas las pruebas necesarias: informes médicos, testigos, documentos, etc.
¿Cuál es el procedimiento para impugnar un testamento?
Lo más importante antes de iniciar cualquier proceso es la revisión del testamento, es decir, disponer de una copia, así como del Registro de Últimas Voluntades. Para este primer paso es esencial contar con un abogado especializado en herencias: Legaltic. Este profesional es el que se encargará de analizar la viabilidad jurídica, es decir, si existen fundamentos legales para reclamar.
A continuación, se debe interponer la demanda ante el juzgado correspondiente (el del último domicilio del fallecido) junto con las pruebas que se hayan reunido.
Y, por último, se celebra un juicio en donde cada parte expone sus argumentos para, finalmente, que el juez decida si el testamento es válido o no.
En definitiva, impugnar un testamento es un derecho que la ley reconoce, no obstante, se debe ejercer en base a causas concretas y, además, con el asesoramiento adecuado. Contacte con nosotros para que le asesoremos ante cualquier duda que tenga sobre su herencia. En Legaltic contamos con una amplia experiencia en esta rama jurídica.